Los ciudadanos participantes tomaron un curso conjunto de 36 horas en la UDEM, la Escuela de Gobierno del Tec y la UANL; su labor permite aumentar la vigilancia ciudadana y la transparencia en los procesos de compra gubernamentales.

Una veintena de ciudadanos se reportó lista para acreditarse como testigos sociales, luego de concluir una capacitación conjunta con ese fin en las 3 principales universidades del estado coordinada por la Contraloría del Estado y el Consejo Nuevo León para la Planeación Estratégica.

El curso de capacitación para testigos sociales concluyó con la entrega de diplomas en la sala polivalente de la Facultad de Ciencias Biológicas de la Universidad Autónoma de Nuevo León, luego de 36 horas repartidas entre ese lugar, la Escuela de Gobierno del Tecnológico de Monterrey y la

Universidad de Monterrey.

Carlos Salazar Lomelín, presidente ejecutivo del Consejo Nuevo León, afirmó que esta capacitación marca un hito en el estado encaminado a formar modelos de participación organizada que permita intervenir adecuadamente en los asuntos públicos y potencie las capacidades existentes.

“Es muy distinto cuando uno solo señala el error, la incapacidad, la diferencia, o el problema, a cuando uno camina este difícil proceso que es participar de una forma organizada, con propuestas, y tratando de que esa propuesta traiga consigo una mejora en la sociedad como un todo”, expresó.

Salazar Lomelín indicó que dedicar tiempo, conocimiento, interés y enfoque, sumado a una mejor preparación, permitirá valorar cada vez más la labor de los testigos sociales, de tal manera que sea una aspiración ciudadana y se demuestre que los ciudadanos están más capacitados para vigilar y proponer.

Aunque la labor de los testigos sociales no recibe ninguna remuneración, su observación y posterior documentación es fundamental en la ejecución y transparencia de los procesos de compras del Gobierno del Estado y municipales a los que sean convocados a participar.

Un testigo social es un ciudadano que, previo registro ante la Contraloría estatal, participa como observador y con derecho a voz en los procesos de contrataciones que lleven a cabo las dependencias y entidades de la administración pública estatal.

José Quiroga Castañón, coordinador de la Comisión de Gobierno Eficaz y Transparencia del Consejo Nuevo León, señaló que se prevé que esta primera experiencia permitirá aumentar la vigilancia ciudadana y la transparencia en los procesos de compra gubernamentales.

“Una buena parte de la riqueza del estado está en su academia, por lo cual quisimos reforzar con ella la certificación que por ley tiene que darse a quienes participen formalmente como testigos sociales”, manifestó.

En la UDEM se dio la introducción, marco normativo y principios básicos; continuó en la Escuela de Gobierno del Tec con los procedimientos de contratación, el marco legal y funciones del testigo social; y concluyó en la UANL con un caso práctico y aspectos relevantes de la Ley de Obra Pública del Estado.

Quienes concluyeron la capacitación podrán continuar con los demás requisitos para ser registrados en el padrón de testigos sociales por parte de la Contraloría del Estado, que les apoyará en ese proceso.

Las personas que tomaron el curso aseguraron por escrito no ser funcionarios públicos o que no lo hayan sido en el último año, además de contar con estudios o experiencia profesional.

El Plan Estratégico 2013 estableció dentro de sus 47 prioridades Identificar y eliminar causas, condiciones y factores de corrupción; Establecer procesos para la detección e investigación de los actos de corrupción; y Desarrollar capacidades para mejorar la eficacia y rendición de cuentas del Gobierno.

En el evento también participaron por parte de la UANL Juan Manuel Adame Rodríguez, director de Educación Continua y Desarrollo Profesional; y Antonio Guzmán Velasco, director de la Facultad de Ciencias Biológicas.

Asimismo, estuvieron Héctor Garza Sánchez, director de Transparencia Gubernamental y Calidad de la Contraloría del Estado; Rafael Ibarra Garza, director del Departamento de Ciencias Sociales de la UDEM; e Ivette García de Hoyos, coordinadora de la sede Monterrey de la Escuela de Gobierno y Transformación Pública del Tecnológico de Monterrey.